Con el objetivo de conmemorar el Día internacional contra la trata de personas, la ministra de Justicia y Derechos Humanos, Marcela Ríos, inauguró el seminario nacional “Criminalidad organizada y la asistencia a víctimas de delitos de trata de personas”, que tiene como propósito visibilizar las actuales manifestaciones contemporáneas de este delito en Chile y las acciones intersectoriales en torno a la asistencia a víctimas.

Junto al subsecretario de Justicia, Jaime Gajardo; y al Jefe de Misión de la Organización Internacional para las Migraciones en Chile, Richard Velásquez, se dio el vamos al encuentro en el que participó un gran número de funcionarios incumbentes en el tema de la seguridad y crimen organizado, y que también contó con el saludo de la ministra del Interior y Seguridad Pública, Izkia Siches.

En la instancia, la ministra Marcela Ríos destacó que “como Estado hemos asumido el compromiso de tipificar el delito y de generar una mesa de trabajo a nivel nacional y en todas las regiones del país. Como ministerio tenemos el honor de coordinar este trabajo intersectorial en cada una de las regiones”.  Agregó que “es esencial este abordaje como gobierno, con foco en los Derechos Humanos, con la prioridad en enfrentar el crimen organizado y en los problemas de inseguridad que vive nuestra comunidad”.

En tanto el Jefe de Misión de la Organización Internacional para las Migraciones en Chile, Richard Velásquez, valoró “el esfuerzo del gobierno y del Estado chileno en el combate a la trata de personas. Las condiciones actuales nos obligan a tener un abordaje multidimensional del proceso y, por sobre todo, tener una visión enfocada mucho más hacia las víctimas”.

Chile ratificó el año 2004 la “Convención de Naciones Unidas contra la delincuencia organizada transnacional” y su protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente en mujeres y niños (Protocolo de Palermo) y el delito fue tipificado en 2011 en el Código Penal.

Víctimas y causas formalizadas: entre el 2011 y 2021, se han identificado 309 víctimas en 52 causas formalizadas. El 45% son víctimas de sexo masculino, todos por trata laboral y el 54% son víctimas de sexo femenino, en su mayoría con fines de explotación sexual. De este total, se han identificado 25 víctimas niños, niñas y adolescentes.